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La posibilidad de que la ciudadanía incida en las definiciones económicas que toman intuiciones del país, como lo es el Banco Central, ha sido uno de los temas claves que han levantado sectores de izquierda, la Fundación Nodo XXI y su presidente Carlos Ruiz Encina, hoy candidato constituyente por el Distrito 10.
La democratización de las instituciones que dirigen el crecimiento fue el tema abordado en este foro, al igual que el futuro modelo de desarrollo, frente a un proceso en curso de nueva Constitución, instancia que fue conducida por la periodista Jennifer Abate.
“El debate constituyente está muy encerrado en una forma de buscar unidad y evitar la fragmentación, pero también es urgente tener contenidos sobre el modelo de desarrollo. No se puede llegar a la Convención con una serie de temas puntuales que pueden ser desarticulados posteriormente. Me parece que debemos apuntar a la democratización de las instituciones bajo las cuales está sometida la dirección del modelo de crecimiento, ahí hay un blindaje estructural. Pero hoy hay una oportunidad de democratizar las instituciones que están a cargo de concebir, de definir, de trazar los rumbos del crecimiento”, sostuvo el sociólogo y presidente de Fundación Nodo XXI, Carlos Ruiz.
Sobre este blindaje de las instituciones que determinan el rumbo del modelo neoliberal, Javiera Petersen, economista del Observatorio de Políticas Económicas (OPES), coincidió en que el debate sobre estos contenidos está quedando fuera del debate constitucional y del debate público. “Y esto es peligroso porque es muy funcional a los que irán a proteger las instituciones que sostienen el modelo. Si no logramos hacer cambios a las instituciones económicas que hoy están en la Constitución, la verdad es que el horizonte de un nuevo modelo de desarrollo se empieza a diluir”.
En esa línea agregó que, “la discusión económica ha estado limitada a lo que un grupo de economistas ha definido como posible, serio y responsable. Hoy, salir de ese marco y entregarle verdad al debate económico se vuelve urgente para tener un buen debate constitucional”, sostuvo, quien agregó que “no tocar el Banco Central, es no tocar de forma profunda el Estado subsidiario».
Por su parte, Gonzalo Martner, ex presidente del Partido Socialista y economista, señaló que “hay una suerte de apartheid en materia de ideas, hay cosas que se pueden discutir y otras que no se consideran”, en relación al debate económico y el derecho que definen las élites para abordarlo.
Respecto de la discusión del Banco Central, indicó que los Bancos Centrales modernos del mundo “están ampliando su quehacer que ya no es sólo la tarea de la política monetaria, estabilidad financiera, sino además procesos de desarrollo e inversión, tales como los avances energéticos y cambio climático. Un Banco Central con esas funciones no puede estar al margen de la democracia. Hay que encargarle a una entidad que tenga cierta especialidad que implique una nominación de autoridades pero punto, pero nadie puede comportarse como un enclave que responde al Fondo Monetario Internacional (FMI) u otros y no a los ciudadanos y ciudadanas de Chile a través de sus representantes en el Parlamento”.
En su intervención, Roberto Pizarro, economista ex Ministro de Planificación, ex Rector de la Academia de Humanismo Cristiano, enfatizó que “el tema de la democratización económica fue la que planteó la rebelión del 18 de octubre de 2019 y también fue planteado en el Apruebo de la Nueva Constitución, porque ahí se desnudó los abusos desigualdades y engaños que ha significado el crecimiento económico de Chile”.
Asimismo, planteó que hay una serie de instituciones como las Afps, Isapres, sanitarias, que han permitido que una minoría se haya apropiado en estas tres o cuatro décadas del enriquecimiento de Chile, porque este crecimiento no ha sido democrático, no se ha repartido equitativamente. La Constitución Chilena ampara esto porque es fundamentalmente económica.
“Lo principal es frenar el poder del 1% más rico, frenar el poder de los grupos económicos. No se modificó el capítulo 19 de la Constitución que consagra implícitamente el neoliberalismo. Creo que el tema principal de lo que hemos vivido en estas tres décadas es que el 1% más rico del país se ha apropiado del 30% de la riqueza y si vamos al 10% más rico vemos que controlan el 70% del país y eso es lo que hay que apuntar”, advirtió Pizarro.
En esa línea Carlos Ruiz, profundizó que es urgente desarrollar una estrategia política para abordar el proceso constituyente “si la izquierda no acuerda una estrategia podemos ser cercados porque está construida para que una minoría determine. Creo que es muy importante que podamos vincular el proceso de una Nueva Constitución con la posibilidad de democratizar la distribución de la riqueza, porque tienen una relación orgánica, pero aquí el discurso tecnocrático es dominante, es de ‘sentido común’ que no se toquen ciertas instituciones y peor aún que no se debata sobre el tema.”
Finalmente, Ruiz junto con agradecer a los panelistas por la contribución al debate, insistió en que desde su perspectiva, el problema de fondo es desmontar el modelo neoliberal siendo un proceso prolongado que puede tomar más de una década. “Creo que ahora hay un round particular con la Convención y tenemos que ver qué podemos centrar ahí, cuál es el esfuerzo que haremos ahí, en este primer e importante proceso para que el resto del protagonismo de la sociedad pueda seguir profundizando esta transformación”.
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La Fundación NodoXXI es una organización sin fines de lucro cuyo ánimo es contribuir con elaboración de pensamiento y herramientas prácticas a revertir la crisis de incidencia de las mayorías en la definición de los destinos de nuestro país.
El trabajo de Nodo XXI se estructura en torno a la promoción de diálogos, debates y acción, la formación de dirigentes y la elaboración de estudios, propuestas y opinión. Esto, con la perspectiva de pensar un proyecto alternativo al neoliberalismo que permita hacer de Chile un país inclusivo, justo y democrático.